martes, 31 de mayo de 2011

El Verdadero significado del Amor






El amor tiene varias caras: puede ser mezquino o incondicional, contaminado o puro, finito o infinito, vulgar o trascendente.

El amor es un instinto, puede darnos fuerza y esperanza.






Si no existiera el amor nada sería posible. Para profundizar nuestra relación con los demás y tener un corazón de oro necesitamos amar.


Al observar la sociedad actual, encontramos pocos ejemplos de amor verdadero. Lo que vemos son distorsiones u agravios hechos al amor. En lugar de amor verdadero, existe lujuria y ambición. Sin buenas causas y condiciones, el amor personal puede incitar al crimen; puede dañarnos y dañar a los demás.


Si el amor entre un hombre y una mujer no es genuino, puede conducir al adulterio o a amoríos ilícitos.


Debemos cultivar el amor verdadero en este mundo maravilloso. Porque el amor es lo que otorga sentido a la vida.





Hsing Yun







Que pasaría si todos nos rindiéramos sólo al amor verdadero?, el amor esa fuerza poderosa y misteriosa que nos toma desprevenidos, que nos envuelve, nos llena y engrandece el alma. El amor esa unión de seres, de corazones que nos modifica hasta la visión!


Dicen que el verdadero amor trasciende todo infinito, que nunca muere y nos enseña de una manera tierna que la vida es mucho más, mucho más de lo que imaginamos, de lo que nuestros ojos pueden siquiera ver, que nos cambia la vida para siempre..


El amor esa luz azul, que nos llena de una dulce tristeza porque conmociona nuestros sentidos..

Amor o ilusión?, cómo conocer la diferencia?, cómo saber si hay diferencia?, de pronto son varios niveles de una misma energía, que llega a niveles insospechados.


Como sea, el amor te cambia, el amor genuino, ese, que los que lo conocen dicen.. que es la vibración mas hermosa de nuestra existencia..




by Bettina Geloni.
















































miércoles, 11 de mayo de 2011




El Camino a la Felicidad






Todos los seres humanos están en busca de alguna forma de felicidad. Algunos creen que el dinero puede lograrla, pero lo cierto es que éste también provoca mucho sufrimiento y dolor. Como dice un proverbio chino, "La gente muere por dinero, así como los ladrones suelen matar por él".

Luego, hay gente que cree que el amor personal es la fuente de la felicidad. El amor personal es hermoso, pero puede generar aún más sufrimiento que el dinero. Muchas tragedias ocurridas en este mundo han sido causadas por individuos incapaces de superar las dificultades que plantea el amor: mucha gente se ha visto perjudicada por cuestiones amorosas y han arruinado su carrera laboral y su reputación a causa de él.
Peor aún: algunos se han suicidado por amor.

Otros creen que la felicidad es hija de la fama; sostienen que las personas famosas tienen el poder de lograr aquello que ambicionan. Por lo común, sin embargo, muchos individuos que tienen funciones de prestigio sólo se ocupan de mejorar su propia situación y no prestan atención a las necesidades populares. Así pierden el apoyo de la gente y a veces terminan incluso decepcionados de sí mismos.

También existen quienes piensan que pueden encontrar la felicidad mediante el estudio y la investigación; pero la mayoría de ellos, cuanto más se sumergen en sus estudios, más se empobrecen en su vida afectiva y su discernimiento empeora, lo cual genera problemas intelectuales. En lugar de llevar a la felicidad, el camino del estudio puede convertirse en un callejón sin salida.

Entonces, ¿dónde podemos encontrar esta felicidad que buscamos?

En primer lugar, debemos percatarnos de que la felicidad está en nuestro corazón. El contento, la tolerancia, la sabiduría y la fe que albergamos en él son la mayor fuente de la felicidad interior.

En segundo lugar, la felicidad se halla en el afecto y el honor genuinos. Si nos relacionamos con los demás de una manera sincera e íntegra alcanzaremos la felicidad.

En tercer lugar, la felicidad se encuentra en la amistad con los demás seres humanos. Nadie puede vivir sin amigos; la amistad brinda apoyo y genera buena voluntad a lo largo de nuestra vida.

En cuarto lugar, la felicidad se encuentra en la liberación. Porque si logramos sobrellevar los fenómenos del mundo y liberarnos de los problemas y sufrimientos, tendremos felicidad.

El dinero no implica infelicidad, siempre y cuando sepamos cómo darle un buen uso y no nos dejemos esclavizar por él.
Si lo logramos, probablemente nos dé felicidad.
De modo similar, el amor personal puede hacernos felices; pero para ello debe ser puro y sublime, no interesado o contaminado.
La posición social también puede darnos felicidad siempre que compartamos nuestros logros y de ese modo no nos beneficiemos sólo nosotros mismos.



Hsing Yun